Cuando pares un poco de tomar té, levantate, mirate en el espejo. Decite que a veces hay que jugarse. Decite que ni 100 espejos alcanzan.
Decite que hoy sí vas a abrir la puerta, salir de la casa y llegar hasta allá.
Tal vez así, un día, de tanto decirte las cosas, dejes de repetir y empieces a hacer.
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cuantas veces pecamos de decir "mañana..." una y otra vez hasta que lo gastamos.
ResponderEliminarme gusta esa idea de que hay que empezar a hacer :)
me encantó, cortito y al pie.
ResponderEliminarEs verdad, como dice a vampire, a veces pecamos por decir mañana. Estamos tan acostumbrados a qe haya un mañana qe depositamos un monton de nuestro presente en nuestro futuro, mientras qe capaz hoy era el día indicado.
pilas y a vivir el hoy.
PD: Un placer leerte, ya me estarás encontrando por aquí mas seguido :) Muacates!
COMETELA
ResponderEliminarjajaja
oli
volvi :)