Es una ventana chiquitita y circular. Por la noche a veces puedo ver la luna iluminando las calles pero de día el sol llega a iluminar el cuarto.
La ventana está sucia, el polvo acumulado con los años hace que parezca gris y haya perdido la transparencia característica del vidrio. No me importa, ya mencioné que de noche a veces puedo ver la luna.
Las estrellas no. Tal vez Venus. En realidad no sé si es Venus, sé que es una estrella y sé que brilla. No se mueve, está ahí, todas las noches. Dicen que Venus, que no es una estrella pero parece, es la estrella más brillante que llegamos a ver y la primera que sale cuando cae el sol.
Desde mi ventana solo llego a verla a ella sola, por eso pienso que es Venus. Debe ser la estrella más luminosa y hermosa, para ser la única que puede verse a través del sucio y grisáceo vidrio. No sabría decir si es la primera que se ve al llegar la noche, porque es la única que puedo ver.
A veces me pregunto si en verdad se tratará de Venus. Ojalá se trate de Venus. Hay tanto misticismo detrás de ese singular planeta, el único que se ve a través de mi ventana.
De todo el sistema solar, es el planeta más parecido a la Tierra y fue bautizada así en honor a la Diosa del amor.
Los antiguos mitos griegos se condensan en este planeta, la hermosa diosa del amor, inmortalizada admirando su propia belleza por Velázquez.
El antiguo y característico calendario maya nació de Venus, de sus ciclos. El gran imperio maya, con sus sacrificios, con sus Dioses, con sus ritos, basó su concepción del tiempo en ella, en Venus.
Tanta historia, tanta vida, todo esto detrás de mi ventana. Las dos damas del sistema solar se sientan a mi lado por la noche y me observan deslumbrantes.
¿Por qué querría limpiar mi ventana? ¿Para arruinar el misterio? ¿Para saber que no es Venus sino cualquier otra estrella?
¿Para qué? Mientras sea la única estrella, mientras en mi ventana sea la primera en aparecer y la más brillante, sigue siendo Venus. Sigue siendo el misterio, sigue siendo la belleza, sigue siendo la historia.
Perdón que no leí.
ResponderEliminarTe gusta Da-lí.
es muy del romanticismo esto!!! dejar cosas en el plano del misterio, no revelar todo! dejar lugar a la fantasia....NO HAY QUE LIMPIAR TODO! TODO NO PUEDE SALIR A LA LUZ! va, al menos asi lo entendi yo, abrazo juany!
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